Buenos días. Hace poco me refería al voluminoso gasto en publicidad gubernamental y concluía en que se hace un manejo como si lo invertido en una obra X, fuera gracias al sacrificio personal del presidente o Gobierno de turno. Hoy abordo los aspectos de exclusión e informalidad que caracterizan al imperante modelo, que de persistir está en la obligación de hacer necesarios ajustes. El gasto oficial en publicidad es excluyente en cuanto a la proporcionalidad de los porcentajes colocados en la capital y Santiago, respecto a las demás provincias del país. Es excluyente respecto a los diarios tradicionales y las publicaciones alternativas, en lo fundamental las digitales y comunitarias, también lo es encuanto a la alta concentración en pocos grupos mediáticos. Es por demás informal, medalaganario y discrecional, porque no existe una ley que le regule y en consecuencia, dicte los parámetros acerca de cómo deben invertirse entre 7 y 8 mil millones de pesos por año en publicidad gubernamental. Una ley regulatoria es urgentemente necesaria y debe contemplar la descentralización del gasto, disponer un porcentaje para el fomento y sustento de publicaciones alternativas al servicio del desarrollo de provincias y municipios del país; incluir partidas para desarrollar campañas de orientación ciudadana acerca de temas como la presencia de haitianos ilegales en el país, la prevención de enfermedades como la diabetes y la hipertensión arterial, el comportamiento cívico, la vigilancia del hogar en torno a sus niños, la prevención de la juventud en el consumo de drogas y la vuelta a los valores perdidos, entre otras. Por igual tomar en cuenta, para fines de efectividad en los objetivos perseguidos por el gobierno, que es tiempo de asimilar que el liderazgo en materia mediática, que antes ejercían programas, figuras y medios de la capital sobre “el interior del país”, ha sufrido profundos cambios con el florecimiento de canales de televisión por cables, entre otros medios, en la generalidad de los municipios de las distintas provincias del pais. Los líderes de opinión hoy día en esos espacios territoriales, son los productores locales de programas de ese municipio en los canales de ese municipio. Una realidad cambiante que no debe marginarse a la hora de planificar la colocación de publicidad oficial.
