Buenos días. Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados, formuló ayer su disposición de plantear una posible reducción del voluminoso número de diputados que integran el hemiciclo. Lo hizo en el contexto del ambiente de reformas que comienza a formarse en el país, a partir de lo que, al respecto, avanzara el presidente Abinader. Pacheco aprecia que República Dominicana es una nación pequeña para albergar a tantos diputados, consideración que nos resulta razonable y con los méritos suficientes para ser tomada en cuenta. No es posible negar que la composición actual de la Cámara de Diputados es supernumeraria y que el país no necesita a tantos legisladores que, a propósito, dejan mucho que desear. Aunque suene incómodo para algunos beneficiados, ese hemiciclo representa una enorme carga económica para los contribuyentes; sus integrantes devoran grandes sumas en irritantes privilegios y, en definitiva, más que a pobladores ubicados en determinadas demarcaciones geográficas, representan a sus partidos y a sus propios intereses. Lo que habría que someter a prueba es si el sistema de partidos se colocaría a la altura requerida para asumir una decisión de ese nivel. Pero lo cierto es que, de no regularse esa materia, en unas décadas se deberán construir estadios especiales para albergar las sesiones de los señores diputados. Sobre el tema volveremos…