En Nueva York le pusieron traje al mangú con los tres golpes
Razonando
Por Alejandro Espinal
El mangú parece ser el buque insignia de la gastronomía dominicana. A este se le suman el sancocho, el morir soñando y las habichuelas o frijoles con dulce.
Hay otros platos que llaman la atención como el chivo con chenchen, la yaroa. Pero nada como ese preparado en base al plátano.
Su historia está asociada a las raíces africanas dejadas por los esclavos traídos a la isla Española y de otros lugares de América durante la colonización.
De su nombre existe una historia un poco jocosa que data del pasado siglo cuando tropas estadounidenses invadieron República Dominicana en 1916. Cuentan que lugareños ofrecieron su manjar a un soldado invasor que estaba hambriento.
El militar al terminar de comer, en agradecimiento, dijo en inglés «Men good», es decir, buen hombre en español. Sin embargo, los anfitriones escucharon «mangú», suponiendo que ese era el nombre del machacado de plátanos verdes. Inmediatamente comenzaron a usar esa expresión como el nombre del plato.
Para el dominicano, el mangú es un plato que contribuye a mantener la resistencia en
el día o la noche. Por eso los peloteros ganadores del clásico de béisbol en el 2013 decían que lo comían para su fortaleza y se bautizaron como los platos Power.
El mangú pues no es más que plátanos sancochados y luego machacados. Literalmente es como un puré de plátanos verdes, aunque no es tan sencillo como se ve porque a esta pasta se le agrega sal, mantequilla, aceite, cebollas fritas en aceite de limón o vinagre. También un poco de agua fría o cubitos de hielo para suavizar su textura.
Algunos cocineros agregan un poco de ajo, leche y queso rayado. La cantidad depende del volumen del puré.
Sus acompañantes suelen ser huevos fritos, queso blanco frito y longaniza. Adquiriendo inmediatamente el nombre de Mangú con los tres golpes.
Cuando se sirve con uno solo o dos acompañantes es un simple mangú. En ambos casos el encebollado (preferiblemente con cebollas rojas) por arriba no debe faltar.
No cabe ninguna duda de que este sabroso plato de la cocina dominicana está lleno de proteínas.
La diáspora de cualquier país a donde va lleva en su alforja sus costumbres, tales como religión, música, deporte, su comida y su forma coloquial. El mangú es un vivo ejemplo de lo expresado anteriormente.
Precisamente en la ciudad de Nueva York (no hay registro de esto), es donde a mi entender se le puso el nombre de los tres golpes.
Quizás para adquirir un mayor poder adquisitivo le agrega más acompañantes al mangú y los pide en los restaurantes con Los tres golpes, es decir, huevo, salami y queso blanco.
Los tres ingredientes fritos en aceite.
El 5 de febrero se celebra el Día del Mangú en República Dominicana.
Particularmente tengo una variedad que le puse como nombre el Corazón del Mangú, elaborado como de costumbre, pero luego sofrito en la plancha.
Otra variedad de invención mía es el Mangulla, que se elabora mezclando guineos verdes, yautia blanca y yuca.
Por último, recuerde que comer mangú sin aguacate sería tan desafortunado como intentar tomar un baño de sol en un día nublado. El aguacate le da ese toque cremoso y delicioso al mangú que lo hace irresistible.
