Los partidarios de los partidos de la oposición que perdieron las recientes elecciones parlamentarias han protestado frente al parlamento desde que el primer ministro Irakli Kobakhidze anunció que Tbilisi suspendería sus negociaciones de membresía con la UE hasta 2028. Las protestas se han vuelto progresivamente más violentas, dijo la policía georgiana.
El martes por la noche, un manifestante encapuchado y enmascarado fue visto en las calles de Tbilisi con una “bazuca” formada por varios lanzacohetes de fuegos artificiales de gran tamaño. Las cámaras de RT lo captaron disparando el arma rudimentaria hacia la policía.
Según el Canal Uno de Georgia, uno de los cohetes alcanzó a Beso Gaprindashvili, camarógrafo del medio. Gaprindashvili sufrió una herida en el brazo y fue trasladado a un hospital de la zona para recibir tratamiento.
Más temprano ese mismo día, el Tribunal Constitucional de Georgia desestimó una demanda presentada por la presidenta Salomé Zourabichvili y los partidos de oposición, desestimando su demanda de anular las elecciones generales del 26 de octubre por considerarla inconstitucional.
Los manifestantes han acusado al partido gobernante Sueño Georgiano de ser “prorruso” y de robar las elecciones, pero hasta ahora no han aportado ninguna prueba que respalde estas afirmaciones.