Buenos días. El diputado José Horacio Rodríguez, de Opción Democrática, hizo pública ayer su intención de someter una reforma que buscaría reducir la enorme cantidad de diputados y los privilegios de que estos disfrutan. Avanzó que planteará limitar a 140 el número de integrantes de la Cámara de Diputados, actualmente son 190, de manera que se contaría con 50 escaños menos. La intención es loable, pero a nuestro parecer se queda muy corta. Consideramos que la escogencia de tantos legisladores es una carga para los que pagamos tributos, además de que su rendimiento en muy poco favorece a los de a pies. La escogencia de diputados no debiera hacerse por proporción de ciudadanos, sino por circunscripciones. El país no necesita más de dos diputados por cada circunscripción, porque estos no representan al pueblo, más bien son representantes de sus partidos, de los intereses de sus partidos, con el agravante de muchos son lobistas de intereses deleznables. El pueblo tiene que rasgarse las costillas para pagar más de 260 mil de sueldo mensual por cada diputado, sin contar las partidas especiales y salarios a sus empleados. Mientras estos viven como príncipes fungiendo una representación que en la práctica es un engaño, los de abajo no tienen defensa y solo subsisten entre desesperanzas, marginación e inequidad.
