Los niveles de remesas también reflejan las limitaciones del entorno económico de la República Dominicana, evidenciando una “exportación de talentos”. Esto ocurre cuando personas, en busca de mejores oportunidades y condiciones de vida, se ven obligadas a emigrar a otros países para alcanzar una calidad de vida superior a la que podrían obtener localmente.
Este incremento en las remesas está estrechamente vinculado a la diáspora dominicana residente en Estados Unidos, que en 2024 aportó el 80.3% de estos recursos. Los dominicanos residentes en España contribuyeron con un 6.3%, en Haití un 1.7%, e Italia un 1.0%, mientras que otros países sumaron el 10.7% restante.
Sin embargo, para asegurar un desarrollo económico sostenible, es fundamental construir un clima de negocios que permita la generación de empleos bien remunerados y la creación de oportunidades dentro del país. Una economía que pueda ofrecer mejores condiciones laborales reducirá la dependencia de las remesas, impulsando una dinámica de crecimiento basada en la productividad y la innovación. Estas mejoras también permitirían menos incentivos para los dominicanos de emigrar.
Fuente: CREES