El solo hecho de que este martes el Gobierno de Haití hiciera público, a través de un decreto, la lista de integrantes del Consejo Presidencial de Transición, es un buen motivo para que desde ya, el concierto de países y naciones del mundo se comprometa a dar la mano puntual y sincera en favor de un renacer auténtico de la empobrecida y convulsionada nación. Desde ahora está puesta la semilla que habrá de germinar para que nazca y crezca fuerte la esperanza de una reconstrucción que no solo toque lo material y humano, sino que cree el compromiso de provocar un verdadero Estado de derechos y donde su empobrecido pueblo, tenga asegurado su bienestar en todos los órdenes. Es el momento de apostar a Haití, de echar al lado el doble rasero, de sustituir las intenciones y planes macabros de ciertas naciones, que solo ven a República Dominicana como solución ideal. Desde ahora la asistencia comprometida y la cooperación internacional tienen que hacerse presentes y efectivas, naturalmente partiendo del compromiso y la conciencia de que solo en Haití está la solución a los graves problemas de Haití.
