LAS VEGAS, ESTADOS UNIDOS.- El hondureño Teófimo López dominó el comienzo del combate y llegó fuerte al final para imponerse el sábado por decisión unánime sobre el ucraniano Vasiliy Lomachenko, con lo que unificó los títulos de los ligeros de boxeo. El centroamericano aprovechó un lento inicio del ex – monarca para ir edificando una ventaja notable en puntos. Finalizó la contienda con un destacado desempeño en el duodécimo asalto, dejando a Lomachenko ensangrentado y abajo en las tarjetas de los jueces.
López, nacido en Brooklyn, peleó sin embargo en los Juegos Olímpicos de 2016 por Honduras, el país de sus padres, es campeón unificado de la categoría. Y logró algo que pocos consideraban que podría: Dominar al boxeador que quizá reúne las mayores virtudes técnicas en el boxeo.
La victoria le reporto’ múltiples re’ditos al hondureño, al mantener su invicto (16-0) y sumarse los tres títulos que tenía Lomachenko (15-2) al cinturón que había obtenido el año pasado. Es así el monarca indiscutible de las 135 libras.
El tarjeteo de los jueces arrojo’, 119-109, 117-111 y 116. 112, tras el combate realizado en el centro de conferencias del MGM Grand. El púgil de 23 años se mostró más rápido y fuerte que Lomachenko, de 32, quien obtuvo dos oros olímpicos como amateur y quien era considerado uno de los mejores boxeadores profesionales, libra por libra. Sorpresivamente, López fue el mejor boxeador, y demostró que también hubiera podido poner fin al combate antes. Lomachenko terminó con una hemorragia arriba de un ojo en el duodécimo episodio. Ningún evento deportivo mundial produjo más ruido que el resultado de este match.
