La democracia que se gastan los dominicanos y que se ampara en la celebración de procesos electorales cada cuatro años, a lo que ahora se suman las primarias de los partidos, resulta extremadamente costosa e irritante.
Así lo confirma el presupuesto de 16,540 millones de pesos que la Junta Central Electoral (JCE) formula para dos procesos electivos a través de los cuales se escogerán por separado, en el año 2020, a los alcaldes y legisladores, y por el otro lado al presidente y vicepresidente de la Republica.
A esos extraordinarios recursos habrá que sumar lo relativo a la celebración de los procesos de primarias internas por parte de los partidos políticos, cuyo monto no aparece en los desgloses que ofrece la JCE, pero que se cree ronda entre los 1,500 y 2 mil millones adicionales de pesos.
Aunque parece insólito, los partidos políticos y el congreso nacional han impuesto la celebración de dos procesos por separado y, para colmo, agregado el sistema de las primarias, que bien pudieran costearse esas organizaciones con los dineros que reciben del Estado, que a propósito nadie sabe en que lo invierten.
El anteproyecto que diera a conocer el organismo lectoral prevé gastos superiores a los 8,377 millones de pesos, solo en los dos procesos electorales previstos para el 2020, cantidad que pudo ser un mucho menor de unificarse las elecciones como se antes.
Para las logísticas operativas se contempla un gasto casi igual a la parte directamente electoral y que alcanza los 8 mil 163 millones de pesos.
El pueblo dominicano debe aportar de sus costillas los cuantiosos recursos en procesos que pueden ser simplificados y reorientados a los fines de reducir sustancialmente sus costos, solo que a la hora de oficializarse no se tomó para nada en cuenta que quien paga los platos rotos es precisamente quien menos puede.
Se trata de cuantiosos millones que bien pudieran destinarse a cosas más útiles para el país, pero que son gastados en asuntos para producir resultados que no necesariamente satisfacen las expectativas de los ciudadanos.
